El tiempo nos lleva en un viaje sin retorno, pero cuán triste es saber que aquellos que conocimos, con quienes compartimos momentos, se van aun espacio desconocido por cada viviente, solo nos queda verlos ser desechados del mundo viviente, expulsados en una tumba o en el horno que de igual forma nos lleva a ser nuevamente barro, ser nuevamente polvo, hay tiempo de perdonar, tiempos para reconciliar y tiempos que se pierden por nuestras simples decisiones, . . . descansen alma nuevas del mas allá, pues tuvieron su oportunidad y no hubo injusticia.
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