Los simples mortales vivimos una serie de sucesos, algunos podemos controlarlos y otros tantos salen de nuestro control, nos dejamos llevar con nuestras emociones y ese descontrol trae una serie de consecuencias.
La tecnología invadió progresivamente, algunas personalidades consideran como algo maquiavélico, algo maléfico, pero no es la tecnología el problema, el problema es: no saber controlar esa tecnología en beneficio de ser humano. Desde hace ya mas de 30 años que conocí el mundo de la informática, de una manera inusual, de curiosidad, de estar al lado de un gran amigo de aventuras en la universidad, donde siempre estuvo un computador, algo nuevo y que causaba miedo en muchos, casi todos, pero nosotros éramos aquellos locos que preferían gastar las propinas y dinero de algunos trabajos, solo y exclusivamente para comprar unos dispositivos llamados "diskett" de 3.5´ y de 5.25´ de pulgada.
Era un mundo increíble y fascinante, sobre todo cuando compramos una cuenta de correo por algunos dolares, enviamos un mensaje y nos respondieron del otro lado del mundo, algo increíble, sentía que el mundo estaba a nuestros pies. Pasaron los años, cada vez estaba mas relacionado con la informática, pero lo mío era conocer y compartir, llegando a enseñar, cuando nunca recibi una formación académica de informática, sino que todo fue en base a ensayo y error, mecanismo que uso constantemente, tal vez pueda llamarle investigación, pero sea cual fuera la denominación, siempre a quedado impregnado el deseo de conocer, de desmenuzar y saber el porque de las cosas, no hay duda, que no sea despejada a través de las consultas de Internet, debo decir que mi destino y mi futuro eran inciertos, pero las tecnologías, sobre todo el Internet, a hecho que yo conozca personalmente y no estar limosneando, rogando, ni pidiendo ayuda a los expertos, pues la vanidad de ellos por guardar los secretos, fueron destruidos con la Internet. Ese mundo del cual esta envuelto de verdades, mentiras y engaños, pero de los cuales supe discriminar y sacar lo mejor de el, no es cuestión de escuchar vídeos solamente y creer, también a que buscar fuentes bibliográficas, que también están a disposición libre en el internet.
Ese mundo es mi mundo, podría pensarse que debo ser un fanático de los juegos, sin embargo no es así, es allí donde hoy en día veo a muchos padres que con el fin de "sacarse de encima a sus hijos" han empleado las herramientas tecnológicas (celulares, tablets y pc´s), como distractores, pero que ahora se han convertido en los compañeros y casi una prótesis de cada persona, pero no para educarse o formarse, sino como "un mecanismo de adicción", es ahora que los padres que quieren que realmente, sus hijos usen las tecnologías como medios de soporte, ya no pueden, pues ahora se han convertido en una "adicción inseparable"
Aún no entiendo esta adicción, pero también analizándome, creo que también soy parte de esa adicción, hasta catalogo mi adicción como una "adicción controlada". Pero mi adicción hizo que mi destino cambiara radicalmente, tal vez mi destino inicial era la de una persona dedicada a una vida sin aspiraciones, sin rumbo, esperando solo buscar un trabajo simple y conformista.
Comprendí que el destino no está escrito, son las decisiones las que crean tu destino, son esos cambios los que alteran un camino, ya sean para bien o para mal. No hay futuristas que adivina el futuro, solo hay creadores de futuros, basta con conocer algo sobre el Efecto Pigmaleón ,. que algunos padres aplican en sus hijos o tal vez ver una película llamada "El efecto Mariposa", donde aprendemos que cada decisión alterará realmente todo nuestro "destino".
Volviendo al tema, la informática revolucionó mis ideas y creencias, tanto religiosas, sociales y hasta del conocimiento en general, suelo aplicar algo que escuche de un maestro, un gran maestro que alguna vez dijo: "El peligro de pensar, porque puedes descubrir la verdad"y basta con leer o tal vez ver una película de "El Conde de Montecristo", que marcó mi vida, para entender que la información es vital para sobrevivir, sobre todo en este mundo de mortales.
Veo tristemente que los padres modernos se quejan de sus hijos, de ser como son, pero debemos pensar que nosotros somos el resultados de nuestros padres y nuestros hijos son el resultados de nosotros, los padres actuales. No es que la tecnología nos ahoga, es cuanto realmente hemos invertido en nuestros hijos, cuanto hemos permitido o delegado nuestra autoridad, es cuanto hemos afirmado nuestra autoridad, es cuanta sobreprotección hemos brindado, es cuanto empoderamiento falso les hemos hecho creer y de acuerdo a ello serán los resultados. Ver video sobre el tema.
Era un mundo increíble y fascinante, sobre todo cuando compramos una cuenta de correo por algunos dolares, enviamos un mensaje y nos respondieron del otro lado del mundo, algo increíble, sentía que el mundo estaba a nuestros pies. Pasaron los años, cada vez estaba mas relacionado con la informática, pero lo mío era conocer y compartir, llegando a enseñar, cuando nunca recibi una formación académica de informática, sino que todo fue en base a ensayo y error, mecanismo que uso constantemente, tal vez pueda llamarle investigación, pero sea cual fuera la denominación, siempre a quedado impregnado el deseo de conocer, de desmenuzar y saber el porque de las cosas, no hay duda, que no sea despejada a través de las consultas de Internet, debo decir que mi destino y mi futuro eran inciertos, pero las tecnologías, sobre todo el Internet, a hecho que yo conozca personalmente y no estar limosneando, rogando, ni pidiendo ayuda a los expertos, pues la vanidad de ellos por guardar los secretos, fueron destruidos con la Internet. Ese mundo del cual esta envuelto de verdades, mentiras y engaños, pero de los cuales supe discriminar y sacar lo mejor de el, no es cuestión de escuchar vídeos solamente y creer, también a que buscar fuentes bibliográficas, que también están a disposición libre en el internet.
Ese mundo es mi mundo, podría pensarse que debo ser un fanático de los juegos, sin embargo no es así, es allí donde hoy en día veo a muchos padres que con el fin de "sacarse de encima a sus hijos" han empleado las herramientas tecnológicas (celulares, tablets y pc´s), como distractores, pero que ahora se han convertido en los compañeros y casi una prótesis de cada persona, pero no para educarse o formarse, sino como "un mecanismo de adicción", es ahora que los padres que quieren que realmente, sus hijos usen las tecnologías como medios de soporte, ya no pueden, pues ahora se han convertido en una "adicción inseparable"
Aún no entiendo esta adicción, pero también analizándome, creo que también soy parte de esa adicción, hasta catalogo mi adicción como una "adicción controlada". Pero mi adicción hizo que mi destino cambiara radicalmente, tal vez mi destino inicial era la de una persona dedicada a una vida sin aspiraciones, sin rumbo, esperando solo buscar un trabajo simple y conformista.
Comprendí que el destino no está escrito, son las decisiones las que crean tu destino, son esos cambios los que alteran un camino, ya sean para bien o para mal. No hay futuristas que adivina el futuro, solo hay creadores de futuros, basta con conocer algo sobre el Efecto Pigmaleón ,. que algunos padres aplican en sus hijos o tal vez ver una película llamada "El efecto Mariposa", donde aprendemos que cada decisión alterará realmente todo nuestro "destino".
Volviendo al tema, la informática revolucionó mis ideas y creencias, tanto religiosas, sociales y hasta del conocimiento en general, suelo aplicar algo que escuche de un maestro, un gran maestro que alguna vez dijo: "El peligro de pensar, porque puedes descubrir la verdad"y basta con leer o tal vez ver una película de "El Conde de Montecristo", que marcó mi vida, para entender que la información es vital para sobrevivir, sobre todo en este mundo de mortales.
Veo tristemente que los padres modernos se quejan de sus hijos, de ser como son, pero debemos pensar que nosotros somos el resultados de nuestros padres y nuestros hijos son el resultados de nosotros, los padres actuales. No es que la tecnología nos ahoga, es cuanto realmente hemos invertido en nuestros hijos, cuanto hemos permitido o delegado nuestra autoridad, es cuanto hemos afirmado nuestra autoridad, es cuanta sobreprotección hemos brindado, es cuanto empoderamiento falso les hemos hecho creer y de acuerdo a ello serán los resultados. Ver video sobre el tema.
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