Día marcado

Tal vez se pueda dudar de que los sueños no son premonitorios, pero personalmente siempre me han servido de anuncios, tal vez es algo no creíble, pero llegan para, a veces, ser transmisores de noticia para personas que dependen de nuestras decisiones y les tengamos que decir que ya no podrán seguir laborando. Queda conversar con ellos y quedar en paz, impartirles palabras esperanzadoras, mencionarles que a lo largo del tiempo en que compartimos momentos laborales, todos fueron de los mas gratos, llenos de una participación abierta y con el mayor respeto, además de que por ser jóvenes, llevaba siempre consejos que solo buscaban convertirlos en jóvenes responsables y correctos. Queda en mis pensamientos que fueron tratados como lo que son: seres humanos y no pensar como aquellos que creen que ser joven, es sinónimo de explotarlos sin el mas mínimo respeto. Hoy hablando mediante el uso de la tecnología, compartimos como si fuera la última cena, pero fue aquella donde estuvo lleno de emociones y de consejos que siempre tuve con ellos y es que los jóvenes tienen algo tan grandioso y es su ímpetu, su fuerza y sobre todo algo que siempre admiro en las personas, es su grado de habilidad en las labores que realizan, cada persona vale por lo experto que es, en lo que hace, se hace un maestro y a un maestro se le respeta y se le admira.